Por Agencia de Guardia
Dicen que donde hubo fuego, cenizas quedan. Pero en este caso, parece que quedaron cenizas, brasas, y una llamita nueva que ya está haciendo calorcito. A ocho meses del portazo sentimental con Pampita, el empresario y exlegislador Roberto García Moritán habría encontrado consuelo —y algo más— en los brazos de una periodista que, según las malas lenguas, no vino a pasar desapercibida.
Porque si hay algo que el amor tiene en común con la política es que siempre vuelve… y a veces con más rating que un repechaje de Gran Hermano.
Nueva etapa, nueva dama
La señal vino desde lo alto de Sálvese Quien Pueda, donde Yanina Latorre, que tiene más data que la nube de Google, tiró la bomba: “Encontró el amor. La lleva a su casa, pernocta, va a eventos con ella. No se esconden ni da la sensación”. Y claro, si hay vecinos mirando, es casi oficial.
La susodicha es Priscila Crivocapich, exmodelo devenida periodista deportiva, con 42 años y un currículum afectivo que incluye empresarios, periodistas, políticos y, ahora, al ex de Pampita. Como diría Moria: “¿Quién pudiera, no?”
Según trascendió, la relación va viento en popa, con cenas, encuentros en el SUM y presentaciones a amigos. No es una historia de backstage, sino de escenario.
¿Quién es Priscila?
Nacida en San Nicolás, Priscila se vino a Capital a los 18 años con la valija llena de sueños y tacos altos. De ahí, directo a Nueva York, donde la rompió en las pasarelas hasta que un día dijo basta y se metió de lleno en el periodismo deportivo.
Hoy la ves conduciendo ciclos en Telefe, como Gol de Medianoche o el stream de Nada más por Twitch. Es bella, es picante y sabe más de la tabla de posiciones que varios técnicos del ascenso. Como quien dice, “tiene calle, tiene cámara y tiene cintura”.
¿Y Pampita?
Mientras tanto, Carolina Ardohain anda por Londres celebrando con su pareja actual, Martín Pepa (sí, el mismo del Gran Hermano histórico). Lejos del chimento criollo, pero nunca fuera del radar. Porque Pampita es como el dulce de leche: aunque no esté en la mesa, siempre está presente.
Y no es casual que justo ahora Moritán rehaga su vida. Como dijo Menem: “Estamos mal, pero vamos bien”. O al menos, eso parece.
El veredicto de la calle
En redes ya estallaron los memes, las comparaciones y las frases típicas de sobremesa:
– “A Pampita no se la reemplaza así nomás.”
– “Esta se lo comió con fritas.”
– “Lo buscó, lo encontró y ahora no lo suelta ni con triple marca.”
Pero si algo nos enseñó la farándula argentina es que la vida sentimental es como el fútbol: se juega partido a partido. Y Moritán, lejos de quedarse en el banco, volvió a la cancha con botines nuevos.
La última del Archivólogo
No podemos evitar cerrar con una perlita de archivo: ¿Sabías que Moritán ya había sido vinculado a figuras del ambiente antes de Pampita? Siempre en modo gentleman, el tipo es de esos que entran a un boliche con corbata y salen con novias con contrato de revista.
Así que, como decía Charly, “los dinosaurios van a desaparecer”, pero los romances mediáticos, jamás.
Nos leemos pronto con más historias de amores, derrotas y resurrecciones…
Porque si algo nos sobra en Argentina es material para el corazón y el archivo.
Agencia de Guardia