Nuestro equipo de exteriores, liderado por Picus Hernán y secundado por la siempre glamorosa Eli B, estuvo en los mismísimos Lagos de Palermo para cubrir un evento que fue puro calor, canto y devoción: el Día Internacional de Luis Miguel.
Desde las 14 hasta las 18, los clubes de fans del Sol de México coparon el verde porteño para hacer lo que mejor saben: vivar a su ídolo, cantar todos juntos, intercambiar reliquias de colección y, sobre todo, compartir ese amor eterno que tienen por Luismi.
La organizadora del encuentro, Liliana Magaretti, tiró la posta con la emoción a flor de piel:
“Luis Miguel es de otro planeta, con su voz irrepetible. Hasta en Corea del Sur lo siguen. Mirá lo que genera: amistad entre clubes, unión, amores, separaciones. Forma parte de nuestra vida. Crecimos con él y nos seguirá acompañando siempre.”
Y es cierto: ¿quién no se enamoró con un lento de Luis Miguel? ¿Quién no lloró un desamor con un tema suyo de fondo? Como dijo Tato Bores: “Si no lo sabés, te lo cuento. Y si lo sabés, te lo recuerdo.” Acá todos sabían: el soundtrack de nuestras vidas tiene la voz del mexicano que hace vibrar hasta los gansos de Palermo.
Los clubes presentes no se quedaron atrás: “El único rey”, “Argentina a tus pies”, “Alguien como tú”, “Entrégate”, entre tantos otros. Cada grupo con su bandera, su remera alusiva y su canción de cabecera. Una verdadera pasarela de amor incondicional.
Hasta hubo imitadores que se pasearon entre el público. Y en medio de risas, mariachis y bailes improvisados, se escuchó una frase que hizo temblar el aire porteño:
“Si apareciera Luis Miguel ahora, lo desnudo, lo beso y no se va más de acá.”
¿Exageradas? Nada que ver. Como dijo alguna vez Moria Casán: “Lo que ves es lo que hay, papi.” Y lo que había en Palermo era pasión, devoción y un griterío que ni la Selección después de la Copa América.
Picus y Eli B, micrófono en mano, fueron los testigos de lujo de una sobredosis de Luis Miguel que terminó a las 6 de la tarde, o mejor dicho, cuando las fans decidieron que era hora de volver a casa.
Porque Luis Miguel no se escucha: se vive. Y en Palermo quedó demostrado.
Y porque LuisMi es eterno, la llama sigue viva gracias a sus clubes de fans, que lo siguen como si cada show fuera el primero. 💛
Ellos mantienen intacta la pasión y la devoción, y acá los nombramos con orgullo:
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Te Propongo (@tepropongolm)
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Argentina, Como Siempre te Soñé (@comosiempretesonie)
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Alguien como tú (@alguiencomotulmfans)
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Historia de un amor (@_historiadeunamor)
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Toda la vida por Ti (@todalavidaporti)
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Argentina a tus pies (@argentinaatuspies)
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Labios de miel – Rosario (@labiosdemiel.rosario)
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Amarte hasta el fin (@amartehastaelfinlm)
Porque como dijo el propio LuisMi alguna vez: “la incondicional… eres tú”. 🌹✨
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